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“Antonio es uno de los mejores del mundo, juntos haremos historia”. Así anunciaba Steven Zhang, Presidente más joven en la historia del Inter de Milán con 27 años, la llegada del cotizado entrenador italiano Antonio Conte, en reemplazo de Luciano Spalletti, con un contrato de tres años de duración a razón de 9 millones de euros por temporada más incentivos, convirtiéndose así en el técnico mejor pagado de Italia y entre los primeros del mundo.

El cuadro “Nerazzurro” viene de ocho temporadas muy duras, sin títulos, incluidos dos cambios de propietarios, once entrenadores y tres de esas temporadas sin participar en competiciones europeas.

Luego de dos buenos años con Spalletti, donde se recuperó la presencia en Champions League, era el momento de dar el salto de calidad y Conte tiene el perfil ideal para hacerlo. Un líder carismático, con mucho carácter, personalidad, y mentalidad ganadora, que sabe como sacar lo mejor de cada jugador priorizando al grupo por encima de las individualidades, y donde un vestuario unido es la base para el éxito.

Sin embargo, a su llegada Conte se ha conseguido un primer obstáculo: su innegable identificación con el odiado rival, la Juventus, donde estuvo 13 temporadas como jugador y tres como entrenador, consiguiendo ser campeón de la Serie A esos tres años, que además fueron el inicio a esta racha que ya alcanza ocho títulos de liga consecutivos.

Claudio Villa/Getty Images Sport

La “Curva Nord”, el sector más radical de la “tifosería” interista emitió un comunicado de desacuerdo con su llegada. Si bien, en el video de su presentación en las redes sociales del club, Conte explicó su elección de esta manera: “Por qué yo? Porque comparto con ustedes la misma determinación y hambre de gloria”, una frase que al parecer calmó un poco los ánimos. Igualmente los fanáticos juventinos consideran una traición que dirija al gran “enemigo” e incluso algunos han pedido que le retiren la estrella que tiene dedicada en el Juventus Stadium.

No es la primera vez que el Inter contrata a un técnico de renombre con pasado (y mucho arraigo) “bianconero”, como en su momento ocurrió con Giovanni Trappattoni y Marcello Lippi.

Otro punto que Conte debe atender desde su llegada es el “Caso Icardi” quien se declaró en rebeldía ante el club a mitad de temporada al haberle retirado la banda de capitán, y en donde los malos modos de su representante (y esposa) Wanda Nara, han ayudado a una ruptura casi total con la institución. Conte debe comunicarle al argentino que ya no es el centro del proyecto y que no entra en sus planes futuros por lo que debe partir, eso sí, con una oferta de no menos de 60/80 millones de euros.

Alessandro Sabattini/Getty Images Sport

Será clave en este nuevo proyecto el regreso de Gabriele Oriali, figura histórica del club, quien como mano derecha de Conte será una piaza primordial en la función de enlace entre directiva y jugadores, e incluso entre entrenador y afición en caso que el pasado juventino de Conte siga dando problemas. Además, Oriali representa el único vínculo con la generación del “Triplete” con Massimo Moratti de 2010.

Cómo jugará el Inter de Conte?

Antonio Conte se consigue en el Inter con una plantilla competitiva pero definitivamente mejorable, a la cual impondrá desde el primer día su esquema base 3-5-2, que le ha dado tantos frutos en todos los equipos que ha dirigido. Es por ello que se negocia con jugadores solicitados por el entrenador que sean perfectamente adaptables a este dibujo táctico. Lograr en el menor tiempo posible que su equipo juegue “de memoria” y tenga una superioridad física con respecto a cualquier rival es el objetivo.

Con la anticipada llegada del uruguayo Diego Godín, Conte podrá contar con un trío de defensores centrales de los mejores de Europa, junto al holandés De Vrij y el eslovaco Skrinniar. Para el medio campo se llevan negociaciones avanzadas con Nicoló Barella, joven sensación del Cagliari de 22 años, ya internacional absoluto con la Azzurra, por quien el Inter estaría dispuesto a pagar una cifra superior a los 30 millones de euros más la cesión de uno de sus cotizados juveniles (Espósito, Dimarco o Bastoni). En caso de no concretar dicha operación, Lorenzo Pellegrini de la Roma sería una alternativa.

Emilio Andreoli/Getty Images Sport

Las bandas serán la fundamentales en el nuevo Inter de Conte. Por la izquierda la idea es recuperar la mejor versión de Ivan Perisic, incluso en tareas más exigentes y con mayor recorrido. También cuenta por ese costado con Asamoah a quien ya tuvo en la Juve. Para el sector derecho debe llegar algún fichaje. Darmián y Zapacosta (a quien llevó al Chelsea) son operaciones abordables al no ser titulares en Inglaterra. Pero ha sonado también la opción de Victor Moses a quien Conte designó esa función en el Chelsea con excelentes resultados. Sin embargo, el máximo deseo sigue siendo Federico Chiesa de la Fiorentina, por quien la Juve también está muy interesada. El internacional argentino Rodrigo De Paul, de buena campaña en el Udinese también aparece en escena como alternativa.

En el ataque, y a espera de resolver el tema Icardi, es un hecho la llegada de Edin Dzeko, a quien ya Conte intentó llevar al Chelsea hace dos años, y por quien pagarán 13 millones de euros a pesar de sus 33 años. Un delantero de experiencia para apoyar al joven y prometedor Lautaro Martínez. Ante una inminente despedida de Icardi, no se descarta la llegada de Romelu Lukaku, uno de los favoritos para el ex entrenador de la Juventus y la Selección italiana.

Gareth Copley/Getty Images Sport

Luego, circulan muchos rumores como es usual en este periodo del mercado de fichajes. La prensa italiana especula con un cambio (nada descabellado) con la Juventus por los argentinos Mauro Icardi y Paulo Dybala, un canje que parecería venirle bien a ambos jugadores. Aleksandar Kolarov, Alexis Sánchez y Marko Arnautovic (ya estuvo en el Inter hace 10 años) son nombres que también han sido vinculados al cuadro nerazzurro.

Para hacer estos sueños realidad, el club recibió recientemente la buena noticia de la salida del “Settlement Agreement” del Fair Play Financiero, en el que se encontraban desde mayo de 2015, así que ahora el Grupo Zuning, propietario del club, podrá comenzar a mostrar realmente su potencial económico.

En 2011 Antonio Conte llegaba a su amada Juventus con la misión de abrir un ciclo ganador, que perduró incluso después de su marcha. Hoy llega al gran rival, el Inter Milán con el objetivo de desbancar a esa Juve y convertirlos en el nuevo Rey del Calcio. Lo logrará?